Nada mas que con un patín de 2 y 4 ruedas los surferos de
los años 30, 40 y 50 tenían un objetivo: comenzar desde lo alto de una ladera y
bajarla.
El objetivo principal era evitar colisiones y mantenerse en pie.
Después estos surferos se dedicaron a vender ruedas y a construir tablas
cuadradas. Estas tablas hacían furor entre los niños, que imitaban a estos
surferos y se tiraban desde las laderas. Este deporte lo llamaron
provisionalmente Sidewalk Surfing. Todo fue un éxito. Los chiquillos
organizaron la primera competición de skateboard en un colegio en la ciudad de
Hermosa, California, y 100 personas acudieron al evento. Al año siguiente, en
1965 se convocó el Primer Campeonato de Skateboard que consistía, como veis en
la foto de la derecha, en saltar una pequeña valla pero montado en monopatín.
Fue retransimitido en el programa de la ABC "Wide World of Sports".
El Skate alcanzó gran apogeo en el año 1965 por su publicación en portada de la
revista Life. En este número el skateboard fue descrito como "el deporte
más arriesgado y excitante". Cuando escuchas estas palabras de la revista
piensas en una combinación explosiva. Esto tenía unas consecuencias... Antes de
terminar el año la Asociación Médica de América declaró "los skaters son
una amenaza médica".
¡Pues vaya declaraciones! El skate sufrió un primer hundimiento durante su
historia.
Pero no se puede echar a perder una deporte rebelde así porque sí. En 1966 una
película titulada Skater Dater fue nominada por la Academy Awards. El film no
contenía dialogos, sólo imagenes de skaters realizando chorradas y movimientos
bonitos. Hemos visto suficiente los X-Treme Games para hacernos una idea de
esto, pero hace tantos años, los chiquillos lo flipaban un poco. Tras unos años
de decadencia el skateboard vuelve...
y para vengarse.
Todo esto fue gracias a dos hombres, que lucharon para salvar a toda costa el
skateboard. El primero fue Richard Stevenson, que reinventó la forma de la
tabla añadiendole una cola (tail) para hacerla más manejable, como si fuera una
tabla de surf. Todo sufrió modificaciones, pero una de las más importantes fue
la de Frank Nasworthy, que construyó por primera vez las ruedas de poliuretano,
que dio resultados inmejorables.
Y comenzaron los años de oro para el skate. A finales de los 70, durante dos
años se habían conseguido vender más de 40 millones de skateboards en USA.
Parques dedicados sólo al skate se abrieron por todo el país (unos 300).
Para curiosos, en esta época apareció una tal Guy Grundy, que llevaba ropa de
moto (de cuero) que alcanzó una velocidad de 68 mph en la calle Anaheim Hills´.
Otro momento crucial para la historia del skate fue cuando un skater de florida
llamado Alan "Ollie" Gelfand inventó un nuevo movimiento que permitía
saltar objetos inmóviles como bancos y murillos.
Aquí empezó otra mala época con el skate. Se empezaron a crear leyes que
impedían practicar skate en lugares públicos. Luego el país entero de Noruega
lo hizo ilegal. Los skaters se fueron a los skateparks, pero hasta allí
tuvieron sus propios problemas. A mediados de los 80 casi todos los skateparks
de California fueron cerrados.
Ya en los 90 los skaters han vuelto, pero esta vez con un nuevo tipo de ropa.
Los chiquillos vestian camisetas de manga larga y tapaban la solapa de los
zapatos con los pantalones. Su "banda sonora" fue el rap y el
hip-hop. Para extender este fenómeno se creó la revista Thrasher, que pretendió
que el skate no sólo fuera un deporte, sino una forma distinta de vivir. Las
compañías de skate se han respaldado mediante profesionales, como por ejemplo
Tony Hawk, declarado skater de la década por Thrasher. Este hombre ya fue
profesional a los 14 años, y se compró su casa cuando aún estaba en el
instituto.
En este momento el skate está en la cumbre, sobre todo en USA, donde es el 6º
deporte más practicado, y al menos, la mitad de esa cantidad de skaters viven
en California.